Estoy terminando de leer un libro que,
según mi mamá, es de la tía Adriana.
El autor es un tal Bartolomé Ponce Castillo,
y su obra lleva por nombre
"La saga de los carbuncos"
"(crónicas del río Grande, la quebrada de San Lorenzo y el río Cogotí)".
-lo primero que me deja perplejo es el nombre,
pues a los tales carbuncos apenas los menciona al pasar-.
Este señor relata, en forma bastante desordenada por cierto,
algo de historia, cuentos, leyendas, anécdotas famiiares, etc.
Entre tanta gente que nombra, surgen muchos apellidos
que le sonarían a cualquier Castillo Tapia, como Illanes,
Cereceda, Pizarro y los propios apellidos de la familia.
Él menciona a su bisabuela Petronila Tapia (nacida por el 1850)
y casada con un Pablo Castillo...
Y me corroe la duda de que tenga alguna relación con
-la muy nombrada por el papá- Tía Peta...
que según mi mamá se llamaba Petronila Castillo...
lo que nos convertiría en -aunque muy lejanos-
parientes de este medio fantasioso autor...
Cómo quisiera que él estuviera acá para preguntarle
qué de estas cosas que se relatan en el libro
son verdad...
¿Porqué nunca se nos ocurrió hacer algo así?
¿Escribir un libro como éste, digo?
Ah, si pudiera volver a Carén, una vez más,
ya no subiría cerros, sino buscaría esas raíces
que hemos dejado perderse...
13 comentarios:
Yo leí el libro y lo tengo (autografiado). Conozco al autor y he conversado con él varias veces. Una vez buscamos las coincidencias familiares, pero no.También le pregunté sobre su sistema de investigación, pero evitó los detalles.No me supo decir de donde sacó la información específica sobre Carén.
Recordemos además que "nuestra" Petronila (casada con Manuel Pizarro) era Castillo Araya (hermana de Juan Elías y de Matilde Amalia), PERO nuestro apellido originario era del Castillo, de manera que no le veo parentesco con esta otra familia.
Hay que entrevistar a la mamá y sobre todo a las famosas hermanas Araya de Ovalle las que son primas de los abuelos Juan Elías y Matilde Amalia y, si no me equivoco hijas del mentado tío Vicente Araya, quien (no se por donde) tiene un parentezco con la conocida de ustedes señora Meche.
Nuestra familia es como un rollo de lienza de pescar o un ovillo de lana. Hay que tener ojo y paciencia para desenredarla.
Un escritor de Arica ganó el primer lugar en el nombrado Concurso de cuentos de la U del Norte con un relato llamado Primera Plana en que se cuenta un partido entre Iquique y Victoria donde meten un gol con la mitad de la pelota igual como la "mentira" que relata B Ponce en la página 94.
Misterios de la literatura...
Bueno, lo del partido me lo explico fácilmente:
No debemos olvidar que la gente de las salitreras proviene de las regiones del sur, incluyendo nuestra tierra... así es que más de alguna historia propia de "la cuarta" ha de tener su correspondencia en el norte...
o viceversa.
yo todavia estoy esperando el libro mi mama se lo presto al requi que lo iba a foto copiar
sigo esperando pacientemente.
kena
Sigue esperando...
¿que no leíste que dije que lo estoy leyendo yo?
chistoso.
kena
Ceci, eres una verdadera fuente de información para mí. Cada vez quedo más asombrado con los datos que manejas.
Que nuestro apellido originario era del Castillo ??? me desayuno !!!
Me podrías dar más antecedentes al respecto?
Y esas primas Araya del abuelo?
Referente a Bartolomé Ponce Castillo y su libro "La saga de los carbuncos" me gustaría saber como me podría hacer de un ejemplar para satisfacer mi curiosidad. Si alguien sabe donde adquirirlo se lo agradeceré.
Ahora, no me parece tan raro que por celo profesional oculte su método y sus fuentes de investigación, sobretodo y como dice Rodrigo, que el autor relata en forma bastante desordenada
las historias y anécdotas familiares.
Rodrigo, aún no es tarde para emprender la tarea de investigar sobre nuestros orígenes y la historia de la familia.
No dejemos que se pierdan esas raíces y démonos a la tarea de dejarlo por escrito para nuestros descendientes. Hay que volver a Ovalle y Carén, para investigar todo lo que se pueda y lo que quede. Cuenten conmigo.
Es una tarea larga y tediosa...
ojalá que logremos algo, al menos...
Hay varios que han querido poner por escrito el árbol genealógico de la familia, pero hasta donde sé, sólo llegaron hasta la intención... y eso sería lo básico, la piedra fundamental para lo demás...
Bueno, hay personas claves: En Antofagasta la Maty y el tío Raúl.
En La Serena, la Adriana y no sé que tanto la Consuelo.
En Ovalle, clave, clave, las hermanitas Araya. Laura, Chabela y la otra que no me acuerdo el nombre. Dos de ellas son profesoras. Según cercanos reportes están muy lúcidas y parlanchinas.
En Santiago, sería interesante descubrir a los descendientes de la Vitalia que son unos viejecitos Lanas Castillo y Lagos Castillo (se casó dos veces la Vitalia). La última que yo sé que tuvo contacto con ellos fue la tía Gudy hará unos 40 (sí, 40) añitos una vez que fue a Santiago.
Ahora, según mi padre, el fundador de la familia Castillo chilena sería un vizcaíno llamado Jerónimo del Castillo y Santa Ana.
No sé si él o su hijo Recaredo (nuestro bisabuelo) se cambió el apellido a Castillo para evitar que se supiera que era español (me parece que durante la guerra con España durante el período de José Joaquín Pérez)
Seguramente el Reca tiene estos o más amplios datos.
Cuestión de preguntarle.
Respecto de Bartolomé Ponce, me temo que le falte un poco de rigurosidad en la investigación.Y fuera de Vicente Araya y Manuel Pizarro que aparecen en unas listas oficiales, no hay nadie cercano a la familia que sea mencionado.
No sé si el Reca lo habrá leído, supongo que su opinión va a ser parecida a la mía. Veamos...
Voy a entrar a clase...
Seguramente el libro debe poder encontrarse en la librería Macondo de la Recova serenense, y no debiera ser caro.
No me extrañaría que en la Feria de las Pulgas se pudiera echar una miradita entre los libros que venden (en La Serena)
Me anoto para leerlo cuando toque mi turno
¿Será después de la Kenucha?
Yo ya lo terminé...
Yo también pongo el mío a disposición pero, no se ilusionen de más...
Más substancia tiene este blog.
Guárdenme los archivos, si estoy viva después de jubilar yo puedo editar y publicar ...
Te los guardaré, no creas que te librarás tan fácil...
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