30 de octubre de 2007

¿Post 125? No está mal



Bueno, Felipe y yo pasamos el domingo en Pisagua. A ninguno interesa el que les cuente qué fuimos a hacer allá; eso lo sabemos. Pero, aunque no era la idea "pasear" igual disfrutamos de ver amigos, el paisaje marino impresionante y.... una cojinova supraideológica de chuparse los dedos en la "Picada de don Gato".





[Profe, la de la entrada al teatro no me llegó,así es que no pude arreglarla. Por alguna razón no se vé. Favor no achacar a censura política]

7 comentarios:

Lore dijo...

Me gustaría conocer Pisagua alguna vez

Don Pato dijo...

Pisagua es un lugar que me falta por visita. Me interesa por su pasado y también por su importancia histórica reciente.

Ahora debo agregar un nuevo motivo para llegar hasta allá...conocer la "Picada de don Gato"

Profe, y si me explica en que consiste una cojinova supraideológica???

CeciliaCastillo dijo...

Profe dijo...

Bueno, como se me asegura que la censura política no corre, te explico, primo que este viaje a Pisagua se realiza anualmente en fecha que coincide con un fusilamiento masivo en el campo de concentración de Pisagua el 29 de octubre de 1973 y cercano a la fecha en que en 1990 se encontró una fosa con los cuerpos de algunos de los fusilados.
Se viaja en caravana desde Iquique, Alto Hospicio, Arica, y, a veces desde Santiago. Se realiza a mediodía una ceremonia con ofrendas florales a los difuntos y discursos de las agrupaciones de Derechos Humanos y partidos de izquierda. Después se almuerza, generalmemnte en la plaza del pueblo, se encuentra uno con amigos, van los saludos, el compartir,etc...Los niños se bañan en la playa, los más viejos se caen al frasco, las viejas conversan.
(Este año, Felipe y yo nos escapamos por el antojo de comer pescado)
En la tarde se realiza en el histórico Teatro un acto poético musical discursivo, y, al caer el sol se regresa a la ciudad.
Cuando era un adolescente verdadero, Felipe leyó sus poemas en el teatro varias veces. Otras veces, como este año, le tocó hacer el discurso a nombre de su colectividad política la cual descubrirás de inmediato al echar breve ojeada a su blog.
Guillermo es un poeta al que conozco hace más de 40 años y es miembro adoptado de mi familia chica.
La cojinova era supra ideológica porque en la picá habían juntos turistas capitalistas de buen bolsillo, pintamonos de gobierno y gente digamos como de izquierda. Y la cojinova con arroz y ensalada a la chilena no tuvo ningún reparo en hacer felices a todos.
Debo aclarar que Felipe "se sacrificó" con mi ensalada ya que yo no como cebolla.

Anónimo dijo...

Bueno, yo también tengo pendiente una visita a Pisagua. Pueblo más sufrido que este debe haber pocos. Terremoto en 1868, maremoto en 1877, bombardeo en 1879, combates en 1891, incendio en 1905..., o sea que desgracias no le faltan.
Además de la historia reciente a que se refiere Profe, también está la de la primera mitad del siglo pasado. Dice mi (menos que regular) Diccionario Biográfico-Temático: "En diversos momentos de la vida histórica y política ha servido de lugar de relegación de chilenos que, por razones políticas, habían sufrido el castigo por orden de la autoridad". Creo que esos chilenos merecen algo más que las palabras insulsas y pobres de sentimiento que les dedica el dichoso diccionario.
Tal vez el homenaje incluye a esos viejos de izquierda (de la de antes), a los que los trabajadores les debemos mucho más de lo que creemos, ya seamos moros o cristianos...
Divertido lo de la cojinova, que debe servir para los que son de izquierda y para los que descubrieron (¡en el fondo de su corazón!) que eran de izquierda el día que ganó el "No". Debió ser una cojinova apolítica-multifuncional.

Anónimo dijo...

No conozco Pisagua ni tampoco Chacabuco, de quien nadie habla. De ese sitio que hace ocho décadas fue una de las salitreras más importantes del mundo, nadie hace referencia, y cuando uno pregunta en Antofagasta cómo llegar hasta allí, muchos ni siquiera pueden señalarle un sitio imaginario. Sucede que esa ciudad amurallada de 62 hectáreas de extensión, erigida en medio de la nada a comienzos de la década de 1920 y abandonada luego cuando la extracción del salitre dejó de ser un negocio rentable para las compañías extranjeras, fue reconvertida a partir de setiembre de 1973, en campo de concentración por la dictadura chilena. Debido a un cuidador hasta esa fecha estaba todo en muy buen estado de conservación, el teatro con sus butacas, las casas con mucha madera de calidad, herramientas e implementos de las casas, veladores, camas, ropa de cama, incluída la ambulancia de la Salitrera que tenía carrocería de "madera".
Lo atestiguan escolares que fueron a conocerla antes del 73 y el cuidador contaba cómo era la vida en esa época en forma detallada.
El Andrés visitó Chacabuco con su curso del San José más o menos el año 1999. Dijo que ya no existe la ambulancia, está todo desmantelado, hay muchas huellas de bala en algunas murallas, hay testimonios escritos que dejaron algunos presos, de las casas e implementos no queda nada, todo lo valioso e histórico lo hicieron desparecer. A los alumnos que van les explican lo que fue la salitrera y después también lo que sucedió allí, dónde vivían los presos y vuelven muy impresionados de haber estado en un lugar tan cargado de sufrimiento.

Anónimo dijo...

Psshhh, na' más fácil que llegar a Chacabuco, si está "a la pasadita" yendo hacia María Elena...

A saber a quién le preguntaste...

Anónimo dijo...

Ah!
Por cierto que este blog no tiene censura política, sólo se pide que nadie lo use de tribuna para exponer sus ideas y/o hacer proselitismo.
Pero sería absurdo no poder hablar sobre algo en que estamos inmersos cada día, para no "ofender" a otro que piensa distinto. Nadie debería "ofenderse" por opiniones contrarias a la propia, ya que se da por descontada la madurez de los participantes. Ninguno es un chiquillo (hace rato, dicen...)

(Como ejemplo, cito la excelente relación que tengo con mi querido sobrino preadolescente, pese a nuestras diferencias ideológicas.)