25 de diciembre de 2009

Working

La nochebuena ya pasó.
Nada muy difícil.
Ahora sólo queda dejar pasar este día,
y eso no ha de costar mucho
con tanto trabajo que espera sobre mi escritorio
y las emergencias
que ya ayer se anunciaban para hoy.

Buen regalo,
seguro,
el tener que luchar contra el feriado
y todo el ambiente navideño
para conseguir que alguien nos atienda
y nos solucione nuestros problemas,
a este lado del océano, y también al otro,
bajo este ardiente sol (los de acá)
y a pesar del frío que los mantiene en sus casas (los de allá)

Mala cosa es depender de gente
que,
a diferencia de nuestra jornada de trabajo permanente,
(gran idea de personas que laboran de lunes a viernes tras un cómodo escritorio)
tiene la fea costumbre
de descansar los feriados,
los fines de semana (¿a quién se le ocurre?)
y por supuesto,
en fechas como la navidad...

2 comentarios:

Reca dijo...

Es verdad, nada más desagradable que trabajar en estas fechas, lo único que se puede hacer es conseguir un par de semanas de vacaciones, el que pueda, que lo haga...

tito dijo...

Entiendo tu punto de vista. Yo soy privilegiado de trabajar de lunes a viernes, pero en el pasado tuve la oportunidad de trabajar por turnos y viví la experiencia de pasar Año Nuevo en la minera Escondida. En la noche hicieron un show en el comedor, brindis con bebidas, y más tarde a todos nos llevaron en buses a la mina y ahí vimos fuegos artificiales. Había alegría pero la mayoría estaba en el fondo triste de estar lejos de la civilización, de la familia y de los amigos.