4 de marzo de 2007

Al fin...

Por fin aparece alguien que conoce el otrora afamado libro "El cateo de la laucha"...
Y sí, indudablemente ya debe ir por ese tomo... considerando que citábamos el tomo XXXII
a mis 15 años...

En cuanto a LLawin, que me quedo con ese nombre por ser lo más cercano al idioma local
-ya que no está comprobado fehacientemente que el Kakán haya sido la lengua diaguita a
este lado de la cordillera (según mis últimas investigaciones)- sí es la quebrada aquella de la viuda... aunque ahora ya no quede ni un miserable árbol donde se esconda la pobrecita... a lo sumo tendría que encaramarse en unos tunales que crecen para el lado del alto, que -por lo demás- certifico dan muy buenas tunas...

Y por lo de Rodolfo, Reca, tú que ya te has graduado de coescritor en este blog, por favor explícale lo más gráficamente a Rodolfo cómo se hace; yo no lo puedo hacer, porque no sé
como es en realidad, es distinto ser el autor que coautor...

Ah, y respecto al virus mencionado, obvio que al autor del blog también lo ha atacado, y en más de una ocasión... Incluso debo decir que si no fuera porque lo que se escribe en este blog puede ser editado y reeditado con facilidad -en innúmeras ocasiones- no estaría tan bien escrito ni presentado...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo había escuchado antes Al cateo de la laucha en vez de El cateo de la laucha ¿será plagio?
tito

Rodrigo dijo...

Mhhh, alcance de nombre, a lo sumo...

Tito, te reenvié la invitación al Hotmail...