Estamos acostumbrados a encontrar en los supermercados dos versiones de un mismo producto, la normal y la light o diet, para satisfacer los diferentes gustos o necesidades del consumidor.
Entiendo que el concepto "light" se aplica a otros productos también y se habla, por ejemplo, de literatura light, esa que es más livianita y por eso requiere de menos esfuerzo mental para digerirla y, como los alimentos, deja poco residuo.
Pero he leído con asombro la noticia que apareció hace unos días, que Umberto Eco publicó una nueva versión de su novela "El nombre de la rosa" en sus palabras "con la intención de agilizar algunos pasajes y refrescar el lenguaje", es decir, una edición baja en calorías literarias e indigestas grasas idiomáticas.
Las opiniones, entre los escritores, están divididas entre los que justifican a Eco aduciendo que el autor es dueño de su obra y quienes encuentran que no corresponde, ni siquiera al autor, modificar una obra que ya forma parte del acervo cultural.
Yo creo que "El nombre de la rosa" no es un libro que se pueda leer de una pasada, pero ¿por qué todo tiene que ser fácil?, el problema actual es ese, que todo tiene que rápido y fácil, lo mejor es lo que requiere menos esfuerzo. Pero a mi parecer la lectura, aunque constituya un placer, también tiene que hacernos pensar, despertar nuestra curiosidad.
Hay quienes comparan esta nueva versión con las adaptaciones para niños o jóvenes, de obras literarias que se consideran largas y pesadas. Pero Eco no ha escrito una adaptación para niños, su nueva obra está destinada claramente al público adulto que necesita que les aligeren los textos para poder leerlos, es decir que rebaja su libro para que esté al alcance de un público que no tiene intenciones de subir para alcanzarlo.
Estoy seguro que a nadie le gusta tener que consultar el diccionario dos o tres veces por cada página, pero que los escritores tengan que limitarse a cien o doscientos vocablos para que los lectores no tengan dificultades, me parece muy triste.
Estoy seguro que la "poda" que hizo Eco de su libro no es tan exagerada, ni mucho menos, pero creo que si una persona encuentra una palabra que no comprende, lo lógico es que busque el significado, no que le pasee por encima sin comprenderla ni dejar el libro por "difícil". Ahora si decide dejarlo, déjelo y lea otro, pero no debiera esperar que de un libro existan dos versiones, una original y otra light...
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9 comentarios:
Pero si todos los buenos libros tienen una edición "light", que pone la obra al alcance de todos... Se llaman "películas".
Y El nombre de la Rosa ya tiene su película, de modo que no creo que sea muy interesante -ni tenga mucho éxito comercial- un libro en lenguaje "light".
Los que sabemos leer, ya tenemos la obra original.
Ha ha, conociendo a Umberto Eco, estoy casi segura de que hizo esto como tomadura de pelo a quienes reclaman por lo "difíciles" de sus libros.
Lo que, dicho sea de paso, no deja de ser cierto. Leí El nombre de la rosa y El péndulo de Foucault. Baudolino lo abandoné. Ahora tengo El cementerio de Praga desde hace varios meses y lo estoy leyendo de a poquito.
Se me ocurre que podría pedirle a Isabel Allende que me "lightice" algunos de sus libros para poderlos leer, ya que de la primera página no logro pasar...
"El cementerio de Praga" lo archivé en la sección indigeribles...
Lo comencé y ... la toalla al centro del ring... hay que saber cuando rendirse.
No esperaré a que salga la versión light o el comic, hay tanto por leer que en realidad no necesito a Eco en ninguna de sus versiones.
Como tomadura de pelo, puede ser, pero eso no significa que no esté involucrado también el vil metal.
Money makes the world go around...
A mark, a yen, a buck or a pound
...a buck or a pound
...a buck or a pound.
Is all that makes the world go around
Debo confesar que no he leído nada de don Eco, apenas ví la película El nombre de la rosa. Hoy le ando haciendo empeño a leer a Stieg Larsson, "Los hombres que no amaban a las mujeres" ( debía ser: que odiaban a las...) Tengo además la película que se hizo sobre el libro que se llama " The Girl With The Dragon Tattoo".
Ceci, noto ciertos anticuerpos hacia Isabel...
Primo, respeto los gustos de los demás, pero a veces tengo que explicar el "por qué" de los míos. Siento a Isabelita como la Arjona de la literatura. Obviedad, falta de profundidad y mala sintaxis.
Sin embargo, menos soporto a José Donoso aunque reconozco que escribe bien. Y a Diamela Eltit la admiro profundamente y aprecio mucho sus ensayos, sin embargo sus novelas las encuentro inasibles e insoportables.
Como dice Reca hay tanto por leer, y yo agregaría, y tan poco tiempo que nos queda, que opto por leer solo lo que me gusta y es lo que recomiendo también.
Buena la definición Rodrigo, de las ediciones light....te la copio...
Creo que la única película que he visto junto a nuestra mamá fue ésta, en el ya extinto cine Colón.
Me la habían recomendado en la Parroquia así con la Mary invitamos a la mamá a verla.
Cual no sería mi sorpresa que si bien la temática era religiosa, tenía escenas bien subidas de tono, sobretodo si nos ubicamos en el contexto de más de 20 años atrás.
Me fuí hundiendo en la butaca, como estaba oscuro nadie notó mi incomodidad y color de piel.
La Maty no decía nada, la Mary tampoco, yo menos.
Al final de la película, nos despedimos rápido, nunca más se habló de cine entre nosotros.
Recuerdo que mi mamá dijo que le había gustado. Agregó que la última vez que había ido al cine, las películas eran en blanco y negro, de modo que agradeció tu invitación...
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