Artajerjes era muy conocido (en La Serena) porque era curco, era árbitro de fútbol y tuvo varias trabajos que no recuerdo.
Pero mi papá nos contó más de una vez, que este señor también trabajó en el Telégrafo del Estado, y con su bicicleta partía a entregar los telegramas, los que normalmente llevaban noticias urgentes, buenas y malas.
Pero el personal del Telégrafo leía los mensajes que llegaban y se imprimían en unas delgadas cintas de papel, las que eran pegadas en un formulario y luego se doblaba y sellaba porque solo debía ser leído por el destinatario.
Y en una oportunidad, se celebraba una boda, y entró Artajerjes muy apurado y dijo con voz fuerte:
ALTO, SE SUSPENDE LA BODA.
Estupor, silencio en los asistentes.
-SEÑORITA, MI MAS SENTIDO PESAME, SU PADRE A MUERTO.
La novia se desmayó y algunos asistentes querían pegarle ahí mismo, los que fueron detenidos por otros fieles, no porque estuvieran en desacuerdo que se merecía un golpe, sino por respeto al sagrado templo.
Sin duda que Artajerjes había leído el mensaje previamente y dejó la grande....
(Publicado por Tito)
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