De visita en casa de Ceci (grata por demás), bajé el primer día de dos en dos los escalones, cuarto piso abajo, para comprar pan para el desayuno. Y saludé, obvio, ¿cómo no?, a la señora del aseo, que se afanaba en barrer las escaleras, y al conserje, de abúlico aspecto, encerrado en su recinto. Añadí una sonrisa al regresar, por cierto, que el aire fresco de la mañana y un cielo despejado y azul favorecían el buen humor.
Más tarde, Ceci consideró apropiado el avisar al conserje de mi presencia, para que no fuese a ponerme trabas en mis entradas y salidas. Estaba allí la señora del aseo también, cuando le dijo que estaba de visita su hermano.
- Ya lo sabemos, fue la respuesta.
- ¿Pero, cómo lo supieron?
- Bueno, es que lo vimos salir en la mañana, y nos saludó, así es que tenía que ser su hermano...
- Plop! (como diría Condorito...)
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7 comentarios:
Eso es el resultado de nuestra educación, de la cual me siento orgulloso.
Por ello todavía cuando me encuentro en la calle con algunos de los auxiliares que trabajaban en Sernatur me saludan con tanto cariño. Eso es porque yo los trataba como personas, como iguales. Por eso también es que me sé los nombres de cada uno de los habitantes de nuestro edificio y los saludo cuando me encuentro con ellos. También me sé los nombres de los "caseros" de la feria...
Si, es así, tanto que seguimos saludando aunque no nos respondan o la respuesta sea un gruñido.
O no nos miren a los ojos.
Ya nos pusimos exigentes...
Así no mah pueh...
Cuando doy la mano, no la suelto hasta que levantan la vista y me miran.
Y cuando me saludan y me dicen ¿como estai? digo realmente como estoy, aunque sé que esperan que diga: "bien" para poder seguir...
Si, soy jodío...
Bueno, pero cuando uno se cruza con alguien y le dice ¿Cómo estás? o ¿Qué tal? o Quiubo, es un saludo (Pregunta retórica), de manera que la respuesta debe ser similar.
Ahora, si la persona se detiene, te da la mano y te dice "Hola, Pepito ¿y? ¿cómo has estado?, ahí se responde "Bien, gracias ¿Y tú/Ud.?" (Siempre "Bien", no es momento de decir la verdad).
Ahora, si te juntas con un amigo en compañía de una cerveza, o un café y él/ella te pregunta ¿Qué cuentas? ¿Cómo has estado?, uno puede decir algo más que "Bien" ("Ahí estamos, con los achaques de siempre", "No muy bien y tú, qué dices?)
Hago notar que a veces es riesgoso decir ¿como estás?, porque puede ser tan instructivo como leer un libro de medicina, aprendes cada enfermedad, examen y tratamiento...
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